Profesora:
Antonella Mármol Vila.
Asignatura: Filosofía.
Curso: 2º B.D.
– Falacias –
Una
falacia es un razonamiento incorrecto pero psicológicamente persuasivo. A los
razonamientos inválidos que pueden llegar a ser persuasivos y cuya incorrección no puede detectarse
mediante reglas formales, se los denomina falacias no formales.
La
palabra “falacia”, cabe destacar,
proviene del término latín “fallacia”,
que significa “engaño”, “fraude”, “mentira”.
Existen
muchos tipos de falacias, de los cuales trabajaremos aquellos que serán
presentados a continuación.
Tipos de falacias:
Apelación a la
ignorancia (ad ignorantiam).
Apelación a la
piedad o a la misericordia (ad
misericordiam).
Causa falsa (non causa pro causa).
Apelación a la
fuerza (ad baculum).
Apelación a la
autoridad (ad verecundiam).
Apelación al pueblo
(ad populum).
Contra el hombre (ad hominem).
Definición y ejemplificación:
Apelación a la ignorancia – Es la falacia que consiste en sostener que una
proposición es verdadera porque no se ha probado que es falsa, o que es falsa
porque no se ha probado que es verdadera.
Ejemplo: “Los
extraterrestres no existen dado que nadie ha podido probar que los haya”
Apelación a la piedad o a la misericordia – Se incurre en esta falacia cuando se trata de conmover
los sentimientos de alguien para que acepte una proposición.
Ejemplo: “Jefe
espero que cuando evalúe el proyecto tenga en cuenta que a causa del mal
momento que atravieso, el mismo me costó el doble de esfuerzo”
Causa falsa – Se
comete dicha falacia cuando se toma por causa de un efecto algo que no lo es o
que lo es sólo parcialmente.
Ejemplo: “La
esperanza de vida en nuestro país ha crecido debido a la actualizada gama de
medicamentos que fabrica la industria farmacéutica”
Apelación a la fuerza
– Se da cuando se recurre a amenazas más o menos sutiles para llevar al otro a
aceptar una determinada conclusión.
Ejemplo: “Será
mejor que no cuentes eso de mí, sería una pena que yo tenga que contar lo que
sé de ti y por ello te despidan del trabajo”
Apelación a la autoridad – Se incurre en esta falacia cuando se acude a la
autoridad de una persona prestigiosa, famosa o exitosa para establecer la
verdad de una proposición.
Ejemplo: En publicidad muchas veces se incurre en esta
falacia, como cuando en un comercial una
persona famosa expresa:
“Yo uso crema ‘x’, te la recomiendo” o “Hacé como yo, que lavo mi cabello con el
shampoo ‘y’, verás los resultados”
Apelación al pueblo
– Consiste en hacer referencia a lo que hace todo el mundo o la mayoría para
llevar al otro a aceptar como verdadera una tesis determinada.
Ejemplo: “Mamá,
tenés que dejarme salir a bailar porque los padres de todos mis amigos los
dejan salir a bailar”[1]
Contra el hombre –
Es aquella falacia que en lugar de brindar razones contra una determinada
afirmación, lo que hace es atacar a la persona que la sostiene.
Ejemplo: “No
tenemos por qué aceptar la ética kantiana puesto que Kant fue un solterón,
amargado y aburrido”[2]
Super artykuł. Pozdrawiam serdecznie.
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